2. Chiang Mai

Entre risas, lectura, picoteo y con el bigote congelado por el aire acondicionado pasamos las doce horas en tren que separan Bangkok de Chiang Mai. 

La nortena provincia de Chiang Mai es una region de montanas, valles y rios. Esta region fue el centro de comercio de una prospera ruta de caravanas cargadas de opio, seda y madera, de ahi que birmanos, tailandeses, chinos, laosianos y sociedades tribales vivan en comunidad.

Chiang Mai es ahora la segunda ciudad de Tailandia, punto de turismo, cultura y comunicacion con los paises vecinos del norte.

Para evitar tentaciones y que la mala gente no ensucie su karma, los donativos que se ofrecen en los templos se guardan bajo llave.

Para visitar esta fria y montanosa region, que mejor manera que alquilar una motillo para recorrer las 736 curvas arriba abajo hasta Pai, pueblo abarrotado de turismo tailandes donde fue casi imposible encontrar alojamiento...

...al final, como sardinas en lata, dormimos en este gran palacio que encontramos de txiripa.

Diversidad de etnias habitan estas tierras altas. Lisu, lahu, karen y hmong entre otras. Decidimos visitar alguna de estas comunidades haciendo una caminata de dos dias donde visitamos poblados lisu y dormimos en la mas que humilde morada de una familia karem. Comparando el bullicio de Bangkok con la forma de vida de esta humilde gente se ve la gran diferencia social que aun existe en Tailandia.

Nuestro desayuno fue de lo mas variado y nutritivo, arroz con calabaza, como en la cena.

Asi como en europa la gente se vuelve loca con el futbol, aqui lo hacen con el Muai Thai. Estuvimos en una velada alucinando con este deporte. Cada patada, cada codazo nos hacia recordar nuestra infancia rodeados de peliculas de Van Dam y el temible Tom Pop desencajando columnas a rodillazos. 

El Muai Thai se ha convertido en símbolo nacional de la historia y la identidad de Tailandia.

El combate comienza con un largo ritual que prepara al boxeador espiritualmente para el combate, todo rodeado de la tipica musica ensordecedora.

Es un deporte bastante violento en el que todos los combates que vimos acabaron en Ko.

Uno de los momentos mas gloriosos para nosotros fue la cena que nos pegamos el ultimo dia de estancia en Chiang Mai. Compramos unas ensaladas para acompanar al jamon iberico, el queso y el vino "Principe de Viana" que trajeron Sara Y Muntxi. Que grande!!!!